Blanqueta de ternera

Pele 400 g de champiñones de Parí­s, córtelos en rodajas finas, rocíelos con zumo de medio limón y reserve.

Pique 2 chalotes, aparte 1 cucharadita para la cocción de los champiñones.

Pele, lave y corte en juliana (pequeños palillos) 2 zanahorias.

Reserve.

Prepare 700 g de ternera: retire las partes nerviosas, los restos de piel para conservar sólo la mejor parte y corte en trocitos.



Para la carne, pida a su carnicero "carne para blanqueta", él sabrá aconsejarle, seguramente aleta o pescuezo.

No estoy seguro, a diferencia de algunos, de que sea absolutamente necesaria tal o cual pieza de ternera, no es muy importante y finalmente casi cualquier pieza buena conviene.

En una olla grande a fuego medio, vierta 4 cucharas soperas de aceite de oliva y cuando esté caliente añada la carne y salpimiente.

Haga que tome color revolviendo a menudo, tan pronto como los trozos estén dorados, retírelos de la olla.

Deje la olla a fuego alto y vierta 200 ml de vino blanco seco, rasque bien el fondo de la olla para desglasar.

Agregue entonces las zanahorias y chalotes, 1 ramillete aromático y 2 dientes de ajo.

Devuelva la carne.

Y vierta suficiente agua para cubrir la carne.

Cubra y cocine a fuego lento durante al menos una hora y media.

Al final de este tiempo, vierta el contenido de la olla en un colador y recupere el jugo de cocción que volverá a verter en la olla a fuego medio.

Tire el ramillete aromático y los dientes de ajo.

Prepare el ligue de la salsa, mezclando con el batidor 150 ml de nata, 3 yemas de huevo, 2 cucharas soperas de maizena, el zumo de medio limón, sal y pimienta.

Cuando el jugo de cocción hierva, vierta el "ligue" en él, batiendo fuerte, verá el jugo de cocción espesarse.

Devuelva la carne a la olla, revuelva bien, compruebe el condimento y deje a fuego lento.

En una sartén a fuego vivo vierta 3 cucharas soperas de aceite de oliva, cuando esté bien caliente añada un poco de chalote picado (reservado previamente), salpimiente.

Cocine un minuto...

... y añada los champiñones que cocinará muy brevemente revolviéndolos continuamente, deje de cocinar tan pronto como comiencen a hacer agua...

...y viértalos en la blanqueta.

La blanqueta puede esperar así sobre fuego lento, sin problemas durante mucho tiempo.

Sirva con un arroz pilaf por ejemplo, o también con patatas cocidas al agua o al vapor.