Film estirable
Se trata de un film de plástico muy fino que se puede estirar sobre un envase, y se utiliza generalmente para proteger los alimentos del aire"filmándolos", es decir, cubriéndolos con una capa de film estirado.
Se puede encontrar en los supermercados en rollos de unos veinte metros llamados "film estirable", "film adhesivo" o "film frescor", o en rollos mucho más grandes en tiendas profesionales. Es prácticamente indispensable en su cocina.
El film estirable clásico resiste el frío del congelador o la nevera, pero no puede calentarse sin derretirse. Por lo tanto, no se puede meter en un horno convencional ni en el microondas.
Cocinar el film estirable
Es casi igual que el anterior, de aspecto idéntico y un poco más caro, pero puede calentarse hasta 175°C (347°F). Por tanto, es resistente al calor y al frío. Se conoce como film para cocinar o film para microondas. Comprueba la etiqueta para asegurarte de que resiste la temperatura que piensas utilizar.
Puede utilizarse en un horno convencional o en el microondas.
Nota: si se le cae un rollo de film estirable en una esquina, todo el rollo quedará prácticamente inservible, ya que será casi imposible desenrollarlo correctamente para obtener una lámina uniforme.
Bolsas para hornear
Esta vez hablamos de bolsas que parecen bolsas de congelación, pero que en realidad están hechas de un tipo de nailon que puede soportar altas temperaturas de hasta 220°C (428°F). Originarias de Norteamérica, permiten una cocción bastante extraordinaria sin necesidad de añadir grasa, como en el caso del volátil de 5 horas. Se conocen como "bolsas de cocción" o "bolsas para aves".
Pueden utilizarse en el horno tradicional o en el microondas. Consulte la página Enlaces útiles para saber dónde comprarlas.
Papel sulfurizado
Un poco obsoleto hoy en día, se trata de un papel blanco un poco rígido y ligeramente translúcido, resistente a la cocción, que se utilizaba mucho en pastelería para proteger un molde o intentar evitar que una preparación se pegue al hornearse.
Citado en libros y recetas antiguas, a menudo era necesario mojar el reverso del papel para poder despegar lo que se había horneado en él (macarrones, por ejemplo).
Tiende a desaparecer, sustituido por el papel de horno (véase más abajo).
Papel de horno
El papel de horno es un papel blanco ligeramente rígido y translúcido, resistente a la cocción e ideal para la repostería, ya que cualquier preparación o masa que se hornee sobre él se desprende fácilmente gracias a su superficie muy resbaladiza. Se puede encontrar en los supermercados en rollos de unos veinte metros llamados "papel de cocina" o "papel de horno", o en tiendas profesionales en paquetes de hojas de diferentes tamaños llamados "papel siliconado".
Nota: el papel de horno tiene dos caras, que se distinguen pasando el dedo por encima. Una de las caras es resbaladiza y parece estar engrasada; es la cara superior, y es sobre esta cara sobre la que se deben hornear los alimentos.
Se puede utilizar en el horno tradicional o en el microondas.
Papel de aluminio
El papel de aluminio es una fina lámina de aluminio que se utiliza generalmente para envolver alimentos con el fin de protegerlos o cocinarlos. Se puede encontrar en los supermercados en rollos de unos treinta metros llamados "papel de aluminio" o "papel de aluminio", o en rollos mucho más grandes en tiendas profesionales.
Sólo se puede utilizar en un horno convencional o en la barbacoa, nunca en el microondas.
Nota: si se le cae un rollo de papel de aluminio en una esquina, todo el rollo quedará prácticamente inservible, ya que será casi imposible desenrollarlo correctamente para obtener una hoja uniforme.
Papel de cocina o papel absorbente
El papel absorbente es un rollo de papel grueso y gofrado diseñado para absorber líquidos.
Se utiliza para secar preparaciones o productos colocados sobre él, después o en lugar de un centrifugado, pero también para limpiarlo todo, de ahí su nombre.
Puede encontrarlo en los supermercados en forma de rollos de unos veinte centímetros de ancho, conocidos como "rollo de cocina" o "papel de cocina".
Dispensadores
Tener varios de estos papeles o láminas en la cocina obliga a guardar varios rollos en un armario o cajón, lo que no siempre resulta práctico.
En su lugar, te sugiero que utilices un dispensador de pared, que te permitirá servirte rápidamente una hoja de tres (o más) rollos diferentes.
Ahorren
Como lo indiqué antes, pueden comprar estos papeles en rollos de unos diez metros en los supermercados, pero se puede hacer algo mucho mejor: comprar en una tienda para profesionales de la restauración un rollo de film de 300 metros por un precio muy interesante.
No se preocupen por el tamaño, 300m parecen mucho, pero durarán años y, lo he calculado, ¡es 10 veces más barato que los rollos del supermercado, además de ser de mejor calidad!
Es casi lo mismo para el papel para cocción, puede encontrarlo en paquete de 500 hojas.
Esta vez es 8 veces más barato que los rollos, además el papel no se enrolla sobre él mismo e
y se puede volver a usar varias veces.