Como siempre ocurre con la pasta, debemos inspirarnos en los maestros que son los italianos, muy apegados, y con razón, a una cocción rigurosa y justa, la famosa "al dente".
La cocción es muy precisa: la pasta se sumerge en agua salada que ya está hirviendo y se deja durante el número preciso de minutos indicado en el paquete, un número que depende de la naturaleza de la pasta: 5, 6, 7 minutos o más, luego se escurre y se come, o se sirve.
¿Es imposible fallar? En principio no, pero hay un error muy fácil de cometer, que es cocer demasiado la pasta, y por tanto que quede pegajosa, y mucho menos buena.
Un amigo italiano me señaló que "en casa" (en Francia) la pasta siempre está demasiado cocida, vayas donde vayas a comerla. No es que no sea comestible, sólo que está un poco pasado de cocción, normalmente un minuto más o menos.
No siempre es culpa del cocinero, el error suele estar ya en el paquete, y por eso nos señaló este gran truco.
Si tienes un paquete de pasta donde está escrito en italiano

Respetar el tiempo indicado con precisión (aquí 6 minutos)
Si tienes un paquete de pasta donde está escrito en un idioma distinto al italiano

Reste 1 minuto al tiempo de cocción indicado, por lo que aquí 12 - 1 = 11 minutos.
Con esta sencilla regla, debería tener la pasta siempre al dente.
En
resumen: El tiempo de cocción está indicado en francés en el paquete => restar un minuto del tiempo indicado, el tiempo de cocción está indicado en italiano, no cambiar nada.