Este problema se plantea con todos los polvos finos, como decía, pero vamos a continuar este post centrándonos en la harina.
Tamizado
El objetivo del tamizado es simplemente asegurarnos de que añadimos un polvo de harina fino a nuestra receta, que se incorporará bien con los demás ingredientes, sin hacer grumos.
Desgraciadamente, las harinas siempre acaban apelmazándose, sobre todo a causa de la humedad, y forman bolitas que a menudo son invisibles porque están ahogadas en la masa.
No se trata en absoluto de un problema del producto en sí, incluso la harina granulada sigue siendo buena harina, sino más bien de una cuestión de textura: los gránulos no se mezclan tan bien como el polvo fino, y existe el riesgo de que formen grumos o se queden en una bola en la masa.
Además, rara vez son visibles: echas la harina en la masa, todo parece normal, tienes un buen polvo fino, pero los gránulos pueden seguir ahí.
La forma más fácil de deshacerse de los grumos es tamizar la harina.
Mira la foto de la harina T55, antes de tamizarla...
Cuando sólo queden gránulos en el fondo del tamiz, simplemente presione hacia abajo para reducirlos a polvo, vuelva a tamizar y continúe con la receta a su gusto.
¿Es imprescindible?
Puede que piense, bueno, es harina, así que sigue siendo principalmente un polvo fino, y lo pongo todo en una batidora o lo bato con cuidado, así que no hace falta tamizar.
En términos absolutos, por supuesto, eso es cierto, pero aun así siempre es mejor tamizar porque la masa se mezclará mejor y más rápido, y también es una oportunidad para eliminar cualquier insecto que pueda haber, especialmente en la harina orgánica.
¿Es necesario tamizarlo todo?
Un pastelero profesional diría sin duda que sí, pero creo que si se limita sólo a las harinas y al azúcar glas, ya estará en muy buena forma para el resto de su receta.
Mención especial merecen la harina de castañas y el azúcar glas (véase la foto), que se unen muy fácilmente, como comprobará enseguida al abrir el paquete o la caja.
En
resumen: lo mejor es tamizar todos los polvos finos que utilices en tu receta, ya que siempre es mejor para la textura de la mezcla que vas a hacer y para evitar grumos.
Y Édith no me llevará la contraria ;-)