Esto es especialmente el caso si tienes una de calidad, pero a veces es el caso de tablas un poco más baratas, te habrás dado cuenta de que no tienen patas, son realmente "tablas", en el sentido: una pieza rectangular sin realmente una parte superior o inferior.
Y como resultado, cuando lo pones en tu superficie de trabajo, tienes un efecto de jabón casi inmediato, se desliza o se mueve tan pronto como empiezas a cortar en él, lo que es un verdadero dolor de cabeza.
¿Cómo se puede evitar esto?Muy sencillo, haz lo que hacen los profesionales: dobla un paño de cocina por la mitad y deslízalo por debajo de tu tabla, que no sobresalga nada. La tela actúa como una especie de amortiguador que evita que la tabla se deslice, se mantiene firme en su lugar a lo largo de sus cortes.
En resumen: Para evitar que su tabla de cortar se mueva mientras corta, deslice un paño doblado por la mitad por debajo.