Significa : Hervir una gran cantidad de agua salada, verter en ella las judías verdes por un minuto, sacarlas con una espumadera y sumergirlas en agua muy fría, eventualmente acompañada de hielo. Dejar enfriar, luego escurrir cuidadosamente.
A menudo se recurre a este proceso para conservar el color del alimento en la cocción posterior.