En la misma cacerola, siempre a fuego fuerte, vierta 4 cucharas soperas de
aceite de oliva y cuando esté caliente añada 1
hoja de laurel, 1 pizca de
tomillo e 1
diente de ajo.
Remueva para aromatizar el aceite, después añada 500 g de carne picada, sal y pimienta.
Cocine la carne al gusto, removiendo de vez en cuando.