Todo es muy sencillo, al fin y al cabo una tabla de cortar, un trozo de madera y ¡hop! puedes utilizar tranquilamente tu cuchillo sin arriesgarte a dañar tu mesa o encimera. Pero en realidad es más sutil que eso, porque hay que prestar atención a lo que se compra y, en particular, al material...
8 Mayo 201246 K4.6