Es la cocción la que va a influenciar mucho en el sabor de su terrina, no dude en dejar cocer durante mucho tiempo y a temperatura no muy alta.
Una vez que su terrina esté cocida, deje que se enfríe, luego cúbrala y póngala en la nevera durante al menos 2 o 3 días, para que sus sabores se acentúen plenamente.
Obsérvese que, a diferencia de muchas otras recetas, esta terrina no contiene hígado. Creo (como Gireg) que agregarlo no aporta mucho, ni en sabor ni en textura.
Esta receta puede variarse mucho en los ingredientes, se puede añadir un poco de esto y quitar un poco de aquello sin mayor problema. El único imperativo es respetar la proporción peso de carne/ peso de sal y pimienta.
Por ejemplo, puede hacer una terrina de pistachos, como en la foto, añadiendo a su preparación, al mismo tiempo que las especias, 2 puñados de pistachos cocidos 5 minutos al horno bien caliente.
Para una versión más "ahumada" y el sabor característico que acompaña, añada a la carne 1 salchicha de Morteau cruda, sin piel y no altere el peso de sal y pimienta a pesar de esta adición. Probado y aprobado, en Usson durante un célebre fin de semana de junio de 2010