Prepare un fondo sablé bretón con 350 g de
Masa de Sablés bretones, como
se explica aquí.
Deje enfriar y unte al
pincel con 50 g de chocolate blanco que habrá derretido en
baño maría, luego deje endurecer.
Lo hacemos para proteger el sablé del futuro cremoso y mantenerlo tan crujiente como sea posible.