1 : En una olla grande a fuego medio, vierta 1 litro de leche entera, 80 g de mantequilla, sal y pimienta.
2 : Lleve a ebullición a borbotones hasta que la mantequilla esté completamente derretida.
3 : En un tazón, mezcle en seco y con el batidor 250 g de sémola, 100 g de Parmesano (o Parmigiano Reggiano) rallado y ½ cuchara pequeña de nuez moscada rallada.
4 : Vierta esta mezcla en la leche bien caliente pero fuera del fuego, y bata con el batidor de mano.
6 : Vuelva a poner a fuego lento y siga batiendo hasta obtener una mezcla homogénea. Reemplace el batidor por una espátula de silicona, luego haga secar la mezcla, manteniendola a fuego lento, y removiendo durante otros 3-4 minutos.
7 : Retire del fuego y vierta aproximadamente 1/3 de la preparación en una hoja de film estirable, deje enfriar por unos 5 minutos.
8 : Enrolle en un tramo regular de 4 cm (1,5 pulgadas) de diámetro aproximadamente en el film, y cierre los extremos con un pequeño trozo de cuerda.
9 : Haga esto con todo el resto de la olla y coloque las "salchichas" obtenidas en una bandeja de horno, y ponga en la nevera por unas dos horas.
10 : Precaliente su horno a 180°C (360°F). Engrase generosamente un plato para gratinado.
11 : Retire el film alrededor de las salchichas...
12 : ...y córtelas en rebanadas gruesas.
13 : Colóquelas en el plato para gratinado, haciendo que se superpongan.