1 : La víspera, o incluso varios días antes, hornee las salchichas a 180°C durante unos 30 minutos. Las salchichas deben estar bien doradas, y si obtienes algún jugo, resérvalo para más adelante en la receta. Dejar enfriar y meter en la nevera hasta el día de la receta, protegido con film transparente.
2 : La víspera, pela, lava y trocea el 300 g de cebolla. Colocar las cebollas picadas en un recipiente alto y verter 300 ml de vino tinto sobre ellas. Cúbralo y refrigérelo toda la noche.
3 : Al día siguiente, escurrir las cebollas...
4 : ...recoger el vino de maceración.
5 : En una cacerola a fuego medio, derrita el 30 g de mantequilla, luego añada las cebollas picadas y encurtidas. Cocer unos 5 minutos sin que se dore. Dejar enfriar.
6 : Cortar las salchichas en rodajas o en dados pequeños.
14 : Dejar enfriar sobre una rejilla o una estantería. Su pan Roscoff está listo.
Observaciones
Para estar en consonancia con la receta, que es muy "bretona", elija salchichas Molène y cebollas rosas (de Roscoff, por supuesto) si es posible. Pero si no encuentra ninguna, las cebollas clásicas y otra salchicha ahumada también le servirán.